Comprendió
Caminaba, cabeza gacha, cada vez con mayor prisa, su corazón latía rápido, como si estuviese incomodo dentro de esa masa de carne y hueso que daba forma a su pecho. La calle se torno infinita; bocinas, señalizaciones, gritos, miradas, para el no eran nada, no tenían sentido, lo único que realmente tenia sentido para el, era seguir aquel camino y comenzó a correr. Entonces vio delante de si aquella imagen, algo así como un cable a tierra, el choque con la realidad fue intenso. Se detuvo, levanto su cabeza, sentó en la vereda y sonrió.
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